A la hora de elegir una nueva caldera, es importante encontrar la solución adecuada y adquirir un sistema que satisfaga sus necesidades. Desde 2015, solo se pueden instalar calderas de condensación en lugar de sistemas convencionales. Sin embargo, también se pueden encontrar calderas con sistemas híbridos y bombas de calor, que se utilizan tanto para la calefacción como para el suministro de agua caliente sanitaria.

Hoy vamos a ver con más detalle las diferencias entre las calderas instantáneas y las de acumulación, para entender los pros y los contras de cada modelo y cuál es mejor elegir según el contexto.

Caldera instantánea: características, ventajas e inconvenientes

La caldera de condensación instantánea es un sistema que se caracteriza por sus dimensiones compactas debido a la ausencia de acumulador, lo que representa una solución óptima para reducir la huella en la vivienda. Este aparato es capaz de calentar el agua en pocos segundos: basta con abrir un grifo o una ducha, por ejemplo. El diseño compacto permite instalar la caldera en cualquier lugar (en función de las conexiones de gas y fontanería disponibles).

En cambio, la caldera instantánea es menos adecuada para un uso frecuente y simultáneo del agua caliente o incluso para inmuebles situados en zonas climáticas con inviernos especialmente duros.

Ventajas:

- Buena relación calidad-precio

- Pequeña huella

- Bajo consumo de energía

Caldera de almacenamiento: características, ventajas e inconvenientes

La caldera de condensación con acumulador está equipada con un acumulador, que puede estar integrado en el sistema o separado, como es el caso de la caldera con acumulador externo.

Las calderas de condensación con acumulador proporcionan un alto nivel de confort sanitario, ya que no sólo suministran agua caliente con gran rapidez, sino que también garantizan una temperatura más constante.

Estos sistemas son más voluminosos que los modelos instantáneos, ya que requieren más espacio para la instalación y el montaje del acumulador. Sin embargo, también soportan una elevada demanda de agua caliente y la demanda simultánea de varios puntos de extracción.

Ventajas:

- También es útil para las viviendas más grandes

- Apoyo a las retiradas simultáneas

- Suministro rápido de agua caliente

¿Qué modelo de caldera elegir: de acumulación o instantánea?

La elección entre una caldera de condensación instantánea o una con acumulador depende de varios aspectos, como la cantidad de agua caliente de la que se quiere disponer. Evidentemente, para ambos, es imprescindible un correcto dimensionamiento de la instalación, teniendo en cuenta el número de puntos de toma para identificar la potencia de la caldera. Por ello, es fundamental consultar a profesionales con experiencia.

En general, la caldera de acumulación es adecuada para viviendas medianas/grandes con hogares amplios y varios puntos de extracción de agua caliente entre grifos y duchas, o para quienes desean el máximo confort y no tienen problemas de espacio particulares.

En cualquier caso, es importante evaluar siempre todas las soluciones disponibles, incluidas las calderas murales, los sistemas interiores o exteriores, hasta los sistemas ecológicos como la bomba de calor y la energía solar térmica. Además, también es posible elegir un sistema híbrido, un sistema compuesto por una bomba de calor y una caldera de condensación.