Bomba de calor: ¿hasta qué temperatura exterior es conveniente? | Ariston

Lara Rodriguez | modified: 9 de julio de 2025

¿Hasta qué temperatura exterior es adecuada la bomba de calor?

Una bomba de calor es un sistema de alta eficiencia para calefacción, refrigeración y producción de agua caliente doméstica. Sin embargo, antes de elegir esta tecnología, es es importante conocer el rendimiento de la bomba de calor según la temperatura exterior y entender cuál es el límite de funcionamiento de una bomba de calor.

Esto se debe a que la alta eficiencia energética de la bomba de calor depende en parte de las condiciones ambientales externas. Por lo tanto, por debajo de ciertas temperaturas, podría ser mejor elegir una caldera de gas de condensación o un sistema híbrido (que integra una bomba de calor y una caldera de condensación), especialmente en zonas muy frías donde la aerotermia en climas fríos puede presentar limitaciones.

Examinamos cómo afecta el clima y cómo afecta el frío a la aerotermia en función de la ubicación.

Las temperaturas exteriores ideales para una bomba de calor

Una bomba de calor es un dispositivo alimentado por electricidad que funciona tomando calor de una fuente natural al aire libre (aire, agua o suelo) y transfiriéndolo al interior. El sistema funciona a través de un fluido refrigerante que se mueve en un circuito cerrado, pasando por una serie de etapas: evaporación, compresión, condensación y expansión.

En estas etapas, el fluido refrigerante capta la energía térmica del aire, incluso cuando hace frío. Por eso, hoy existen modelos de bomba de calor para zonas muy frías o diseñados específicamente para trabajar con temperaturas negativas, como ocurre con la aerotermia con nieve.

Esta tecnología se caracteriza por su eficiencia energética, medida a través de indicadores como el COP y SCOP de la aerotermia, que indican cuánta energía térmica se obtiene por cada kWh eléctrico consumido.

Sin embargo, para mantener un buen rendimiento, es fundamental conocer la temperatura mínima de trabajo de la aerotermia. Muchos modelos convencionales alcanzan su límite de funcionamiento cuando la temperatura exterior desciende por debajo de -7 °C, aunque algunos equipos avanzados pueden seguir operando incluso con temperaturas negativas extremas.

Cuándo no instalar una bomba de calor

Una bomba de calor ofrece muchas ventajas: permite aprovechar electricidad renovable, ofrece confort térmico sostenible y reduce la dependencia del gas. No obstante, su idoneidad depende de varios factores, como la temperatura exterior mínima habitual en tu zona.

Si bien algunas bombas de calor funcionan a temperaturas de hasta -20 °C, su rendimiento disminuye considerablemente a medida que el frío aumenta. Por ejemplo, el COP puede pasar de 5 a 3 cuando la temperatura exterior baja de +7 °C a -7 °C, lo que supone una pérdida de eficiencia de casi el 40 %.

Por eso, en zonas con inviernos muy severos, conviene valorar sistemas híbridos o calderas de condensación. Otra alternativa es elegir bien el tipo de equipo: una bomba de calor bibloc o monobloc para frío extremo puede marcar la diferencia, ya que algunos sistemas bibloc ofrecen mejor rendimiento en climas exigentes.

Cuándo es adecuada una bomba de calor aire-agua

Una bomba de calor aire-agua es una de las soluciones más comunes para calefacción y agua caliente. Es perfecta para viviendas con buen aislamiento y sistemas de baja temperatura, como el suelo radiante. Una bomba de calor aire-agua se puede utilizar para calefacción, refrigeración y producción de agua caliente doméstica.

Si vives en una zona templada o donde el invierno no es muy crudo, la aerotermia ofrece una excelente relación entre consumo y rendimiento. Si no, es clave evaluar cuidadosamente el COP y SCOP de la aerotermia, comprobar la temperatura mínima de trabajo, y asegurarse de que la bomba elegida se adapta bien a las temperaturas negativas y a posibles condiciones extremas como aerotermia con nieve.

En cualquier caso, lo más recomendable es solicitar asesoramiento técnico para elegir la bomba de calor adecuada y garantizar su eficiencia energética durante todo el año.