Condensador

Los condensadores, al igual que los evaporadores, son componentes esenciales en sistemas que implican intercambio de calor, tales como aire acondicionado, refrigeradores y sistemas de enfriamiento industrial. Funcionan de manera diferente dependiendo de la modalidad en que se encuentre el sistema, ya sea en modo de enfriamiento o calefacción.

Un condensador se utiliza para enfriar un fluido de transferencia de calor gaseoso (por lo general, un refrigerante), provocando que libere calor y que se condense a un estado líquido. Este proceso ocurre cuando el refrigerante, en su estado gaseoso caliente, transfiere calor a otro medio en lado opuesto, tales como el aire o el agua. A medida que el refrigerante va perdiendo energía, este se enfría y cambia a un estado líquido.

El evaporador, en cambio, funciona de manera opuesta. Permite que el refrigerante, en su estado líquido frío, absorba el calor del aire o del agua en el otro lado. Durante este proceso, el refrigerante se calienta y se evapora convirtiéndose en gas.

Cuando un sistema de aire acondicionado está en modo de enfriamiento, la unidad interior funciona como el evaporador; extrayendo calor del aire dentro de la casa. La unidad exterior, por otro lado, opera como el condensador, liberando el calor absorbido hacia el exterior. Por el contrario, en el modo de calefacción, el proceso se invierte: la unidad interior se convierte en un condensador, transfiriendo calor al interior de la casa, mientras que la unidad exterior opera como el evaporador, absorbiendo calor del aire exterior.