Gas natural: Significado y definición
Gas Natural
Altamente inflamable, el gas natural es incoloro y está hecho de una mezcla de hidrocarburos gaseosos, cuyo mayor componente es el metano. Es un combustible fósil, y también es conocido como gas fósil, gas metano o simplemente gas. Se encuentra habitualmente en formaciones geológicas subterráneas, a menudo junto con otros combustibles fósiles como el carbón y el petróleo crudo. El gas natural ha sido ampliamente usado para generar electricidad, cocinar y calefacción e incluso en algunos países, como combustible para vehículos. También es uno de los componentes químicos que se usan en la fabricación de plásticos, tintes y fertilizantes.
Es conocido con popularidad ya que es un gas natural que se quema completamente, produciendo dióxido de carbono y agua como subproductos. A diferencia de otros combustibles fósiles, no emite hollín y produce niveles significativamente más bajos de otros gases nocivos, tales como monóxido de carbono, óxido de nitrógeno e incluso el dióxido de azufre.
Como consecuencia, el gas natural se ha convertido en una opción muy popular de combustible. Ha reemplazado el uso del carbón como combustible en centrales eléctricas. En casa, el gas natural se usa en electrodomésticos tales como hornos, calderas y calentadores de agua.
Los aparatos que utilizan gas natural, tales como las calderas de condensación, son muy eficientes y económicos. Sin embargo, siempre deben ser instalados por un profesional que pueda proporcionar un certificado de cumplimiento. Un mantenimiento regular tanto del sistema como de sus tuberías y conductos de humos asociados, es esencial para garantizar un funcionamiento eficiente que se mantenga en el tiempo.